¿Es bueno hacer ejercicio en ayunas?

Cuando realizas ejercicio en ayunas, tu cuerpo tiene niveles bajos de glucosa en sangre y depósitos de glucógeno, que son la principal fuente de energía durante la actividad física. Como resultado, tu cuerpo se ve obligado a buscar otras fuentes de energía, como las grasas almacenadas. Esto ha llevado a la creencia de que el ejercicio en ayunas puede ser beneficioso para la pérdida de grasa.

Se ha demostrado que el ejercicio en ayunas puede aumentar la oxidación de grasas durante el entrenamiento, lo que significa que tu cuerpo quema más grasa como fuente de energía. Sin embargo, esto no necesariamente se traduce en una mayor pérdida de grasa a largo plazo. La clave para la pérdida de grasa es mantener un balance calórico negativo, es decir, quemar más calorías de las que consumes. El momento del ejercicio o el estado de ayuno no son los únicos factores determinantes.

Además, el ejercicio en ayunas puede tener efectos negativos en tu rendimiento durante el entrenamiento. Al tener niveles bajos de glucosa, es posible que te sientas fatigado, débil o con falta de energía. Esto puede dificultar la realización de ejercicios intensos o prolongados, lo que a su vez puede limitar tus ganancias de fuerza y resistencia. Si tu objetivo es mejorar tu rendimiento deportivo, es recomendable que consumas alimentos antes de hacer ejercicio.

Otro aspecto importante para considerar es la hidratación. Durante el ayuno, es posible que no hayas consumido líquidos durante varias horas, lo que puede llevar a la deshidratación. La deshidratación afecta negativamente el rendimiento y la salud en general. Por lo tanto, es esencial asegurarte de estar bien hidratado antes de comenzar cualquier actividad física, especialmente si planeas hacer ejercicio en ayunas.